Antonio de Guevara fue un escritor, historiador y eclesiástico; cronista del Emperador Carlos V. Fue una de las figuras clave del Renacimiento español. Sus libros han llegado a muchos países europeos y a lo largo de los siglos XVI y XVII editados y publicados cientos de veces.

Una de sus obras más importantes, que le proporcionó la fama que tiene, es el libro aquí presente: “Epístolas familiares”.

La obra es una colección de cartas en prosa dirigidas a cortesanos y religiosos. No se sabe si fueron cartas ficticias o reales. Caracterizadas por un tono ameno, introducen una novedad al género de la epístola: el hecho de unir al autor y al narrador. Anteriormente, el narrador de la carta siempre era un personaje prestigioso de la Antigüedad, mientras que ahora pasa a ser el mismo autor. Fray Antonio de Guevara antes escribía epístolas donde el narrador era, por ejemplo, Marco Aurelio (el más famoso de sus libros: Libro áureo). Sin embargo, es en esta cuando esta práctica medieval cambia, y verdaderamente luce el espíritu humanista-renovador.