Enrique Gaspar y Rimbau es el autor de esta novela llamada “El anacronópete”. ✨ Ya desde una temprana edad demostró sus grandes dotes literarias, escribiendo su primera zarzuela con tan solo 13 años y convirtiéndose en redactor para “La ilustración valenciana” con 14 años. Su narrativa se vio enriquecida gracias a los numerosos viajes y estancias vividas en el extranjero entre las que destacan Grecia, Francia e incluso Macao y Hong Kong. 🌏
Sin duda, lo más importante de su producción fue la invención de una temática bastante conocida actualmente, pero que supuso una revelación en su época. En 1887, fecha en la que fue escrito “El Anacronópete”, Enrique Gaspar y Rimbau inauguró una larga trayectoria de novelas de ciencia ficción, introduciendo por primera vez en la historia de la narración una máquina capaz de viajar en el tiempo. Deudora de sus teatros, esta novela se divide en tres actos a modo de zarzuela y cuenta las peripecias de Sindulfo García, un científico zaragozano y sus viajes en el tiempo a Rávena, Tetuán e incluso China. El artefacto que da nombre a esta novela, “Anacronópete” lo describió el propio autor de la siguiente manera:
⌛️“El anacronópete”, que es una especie de arca de Noé, debe su nombre a tres voces griegas: Ana, que significa hacia atrás; crono, el tiempo, y petes, el que vuela, justificando así su misión de volar hacia atrás en el tiempo; porque en efecto, merced a él puede uno desayunar a las siete en París, en el siglo XIX; almorzar a las doce en Rusia con Pedro el Grande; comer a las cinco en Madrid con Miguel de Cervantes Saavedra -si tiene con qué aquel día- y, haciendo noche en el camino, desembarcar con Colón al amanecer en las playas de la Virgen América”. ⏳
El autor aprovecha esta novela para incluir también un breve relato llamado “Metempsicosis” en el que realiza una crítica social de su época y “Viaje a China” dónde cuenta su experiencia durante la estancia vivida allí como cónsul.
María Rodríguez Silva